Escribir

Meter el mundo en una página. Sentir el repiqueteo de las teclas del ordenador o, mejor aún, ver cómo se seca la tinta de una pluma estilográfica en un cuaderno conservado a duras penas con un poco de pegamento y una goma. Es mi pasión. El instante en que me siento más vivo es aquel en que releo una frase, un pasaje, una idea que he detenido para siempre en el blanco del papel transformándolo a mi manera. Es difícil hacer comprender eso a los que piensan que la vida es tan sólo el armazón que en el pasado tenías por cierto, a quien ha dejado de emocionarse, prisionero de las innumerables dificultades de la vida. Como si las dificultades fueran únicamente un mal rollo cuando, en cambio, son ocasiones, posibilidades de demostrar que podemos conseguir lo que pretendemos ¿Soy idealista? ¿Loca? ¿Soñadora? No lo sé. Mira alrededor y veo que la vida es dura. Sí, pero también espléndida. Conozco los problemas del mundo, no escondo la cabeza debajo del ala, es difícil encontrar un trabajo que no te dé simplemente para sobrevivir, sino que, además, te permita expresarte y vivir de una manera digna. Y también soy consciente de las innumerables injusticias y violencias que nos rodean. No obstante, no he perdido la esperanza. Me conmuevo al contemplar un amanecer, daría lo que fuese por un amigo sin sentirme por ello pobre. Danzo con la vida,la invito a bailar, la abrazo sin excederme, la miro a los ojos y la respeto y la amo.

Risa

" Y algo le pasa también a él. Y os reís aún más. Y os miráis y parece que todo esté diseñado para haceros reír, y entonces te ríes, te ríes sin cesar, y da la impresión de que el destino esté de tu parte, sí, de que vale realmente la pena reír sin parar. Creo que todavía hoy es una de las cosas que recuerdo con mayor placer, porque los dos pasábamos una tarde de esas en las que, de verdad, la barriga se tensa y te duele de lo mucho que te has reído. En esos instantes no hay nada más hermoso que esa risotada, te olvidas de todo lo que te ha salido mal y te sientes de verdad reconciliado con el mundo. Y entonces dejas de reírte, sueltas aún alguna que otra risita nerviosa, pero después te sientes casi satisfecha y exhalas un largo suspiro, como de alivio. Pues bien, eso es vivir, partirse de risa con una persona a la que quieres y que te hace sentirte querida. "

Por esa canción.

Esa canción que cuando estás mal te saca una sonrisa.
Esa canción que te trae un buen recuerdo.
Esa canción que te hace llorar.
Esa canción que sigue siendo tu favorita.
Esa canción con la que te identificas.
Esa canción que te trae un mal recuerdo.
Esa canción que levanta el ánimo.
Esa canción con la que no puedes evitar bailar. 
Esa canción que te hace soñar.
Esa canción que te da esperanzas.
Esa canción que te recuerda a ese chico.
Esa canción que te dedicaron.
Esa canción que te hace volver a la infancia.
Esa canción que te conmueve.
Esa canción que siempre se te queda en la cabeza.
Esa canción que te cantaba tu madre de pequeña.
Esa canción del verano que tanto cantaste.
Esa canción que te da fuerzas.
Porque las canciones no nos gustan por lo que son, si no por lo que nos hacen sentir.

¿Y qué?

¿Qué pasa si sigo preguntando por ti a cada rato? ¿Qué pasa si tengo ganas de verte? ¿Qué pasa si te sigo pensando y mirando tus fotos? Después de tanto tiempo se convirtió en mi rutina ¿sabes? Vale que me haya prometido a mí misma dejar de mirarte y que me entre esa risa tonta, vale que haya roto mi esperanza, pero lo que no puedo hacer es olvidar lo todo en dos días, no puedo. Porque que mis labios no hayan tocado los tuyos, que tus abrazos no tuviesen el mismo sentimiento que los míos y que tus miradas no significasen nada especial no quiere decir que contigo no haya conocido lo que es el amor. Y voy a seguir preguntando por ti a cada rato, voy a seguir pensándote, voy a seguir mirando tus fotos y voy a seguir teniendo esas incontrolables ganas de verte hasta que todo lo que me haces sentir se desvanezca ¿Y qué? No me  lo puedes impedir. Todo esto me pasa por tu culpa, por ser mi chico perfecto.

Me rindo

¿De qué me vale seguir luchando sin esperanzas, sin ganas, sin ninguna motivación? Dicen que nada es imposible, que tienes que luchar por lo que quieres, que no es fácil, pero todo eso ya no me lo creo. Sí existen los imposibles, por mucho que luches, por mucho que pelees por tu sueño, no significa que lo consigas. Por eso prefiero rendirme, darlo por perdido. Lo prefiero antes de seguir así porque ya he tenido bastante ¿no crees? Aún así no quiero perderte, no quiero que desaparezcas de mi vida, no quiero que esta historia termine, solo quiero que cambie. Mejor aún, quiero que empiece de nuevo, como si no nos conociésemos, ignorar todo lo que ha pasado y empezar de cero. Sí, eso, empezar de cero suena muy bien. Creo que es lo mejor, para ti y para mí. 

Secretos

- ¿Sabes qué? De todos mis amigos conozco algún secreto, pero de tí, no conozco ninguno...
+ ¿Qué secreto quieres que te cuente?
- No se, el que más guardado tengas y más ganas tengas de sacarlo fuera, ese que siempre quieres contar y nunca eres capaz.
+ Pues mi secreto mejor guardado es que cada mañana me levanto pensando en ti, que te pienso todo el día, que por las noches te sueño, que no me imagino el mundo sin ti, que muero si te pierdo, que cada vez que te veo mil sensaciones diferentes recorren mi cuerpo, que cada vez que te abrazo quiero que el mundo se pare para poder abrazarte eternamente y que mis manos sienten el deseo de acariciarte cada vez que estoy a tu lado.