sábado, 23 de febrero de 2013

¿Eres una droga?

¿Sabes? Me encanta leer esas conversaciones antiguas y recordar todo lo que me hacías sentir cada día con un simple "hola ¿que tal te ha ido hoy el día?" Con sólo escuchar el móvil sonar se me revolucionaba mi granja de mariposas y se volvían locas al descubrir un "dime cari" un "que tal amor" un "adiós vida mía" o un "buenas noches guapísima" en la pantalla. Y ahora, después de algunos meses, me siento un poco estúpida por aquellas cosas que, en verdad, eran simples tonterías. Es más, palabras, tan sólo son palabras grabadas en una pantalla, ¿qué cosa más tonta verdad? Pues sí, si te paras a pensarlo es lo más idiota en el mundo. Pero allí estabas tú, esperando como un drogadicto su dosis de cocaína. Y al igual que el drogadicto, tu dosis de "cocaína diaria" se va haciendo cada vez mayor y más necesaria. Ya no te vale con un simple "hola" tu quieres un "hola preciosa", ya no te vale con un "buenas noches" tu quieres un "buenas noches princesa" y ya no te vale con encontrártelo por la calle, tú lo quieres una tarde para tí sola. Ya no te basta con esperar a que él se acuerde de tí, sino que pasas el día como loca intentando encontrar una excusa para volver a hablarle, ¿y por qué? Porque le necesitas, porque el drogadicto necesita encontrar su dosis como sea, cueste lo que le cueste. Entonces, si el amor es comparable con una droga, ¿será él una más?

No hay comentarios:

Publicar un comentario